Esquiar es libertad… hasta que algo se tuerce. Una caída, un rescate en pistas, una fractura lejos de casa o un forfait perdido pueden convertir tu escapada en un problema caro. Con un seguro de asistencia a esquiadores bien diseñado, disfrutas con tranquilidad y controlas el coste.
Qué cubre (según póliza y capitales contratados)
- Asistencia médica por accidente en pistas (urgencias, pruebas, hospitalización).
- Rescate en pistas y traslado en trineo, moto de nieve o helicóptero (según normativa de la estación y la póliza).
- Repatriación/traslado sanitario a Mallorca o a tu provincia de residencia cuando procede médicamente.
- Gastos de acompañante (alojamiento y desplazamiento) si te hospitalizan.
- Forfait y clases no disfrutadas (compensación por días perdidos, si está incluido).
- Rotura o robo del equipo (propio o alquilado) y alquiler de sustitución.
- Responsabilidad civil como esquiador (daños a terceros).
- Regreso anticipado por siniestro grave en domicilio u hospitalización de familiar.
- Asistencia 24/7 en español.
Extras recomendables
- Cancelación del viaje (enfermedad, accidente, citación oficial, etc.).
- Deportes de invierno fuera de España o fuera de la UE/EEE (revisar límites y repatriación).
- Mejora de capitales médicos en destinos con sanidad privada cara (Alpes, Norteamérica, Japón).
- Accidentes personales (indemnización por invalidez/fallecimiento).
Importante tener en cuenta
- Siempre que sea posible, contacta antes con la central de asistencia: te derivan a centros concertados y evitas adelantos. En urgencia vital, actúa y guarda facturas.
- Fuera de pistas balizadas o en actividades especiales (freeride, heliesquí, snowpark avanzado), muchas pólizas excluyen o exigen suplemento.
- Enfermedades preexistentes, competición o uso profesional suelen estar excluidos salvo pacto.
- En viajes fuera del EEE, revisa bien límites de repatriación y tipo de traslado y conviene ajustar capitales y condiciones.
- Guarda facturas, informes médicos y el parte de la estación si hubo rescate.
Para quién es ideal
- Familias que esquían 1–2 semanas/año y buscan solución sencilla con buen capital médico.
- Grupos, clubs y colegios: tarifa colectiva y gestión centralizada.
- Autónomos que no pueden permitirse bajas largas: combinar con accidentes personales e ILT.
- Viajes fuera de Europa: subir capitales y revisar repatriación.

